Fotografía de Nuria Mezquita
Ellas se masturban
y vosotros miráis de reojo,
ellas disfrutan y vosotros volvéis el rostro,
ellas se sonríen y vosotros fruncís el ceño.
Porque no está bien,
no es adecuado,
no deberían,
y sin embargo,
lo hacen.
Lo hacen continuamente
en su casa
en el trabajo
en el coche
en la puerta de la guardería
en el parque
en los bares
en la cama
en la cocina
en la ducha
en una silla,
lo hacen.
Antes de maquillarse
después de vestirse
antes de hacer la comida
cuando recogen el ticket del parking
en el súper
frente a la lavadora
en la discoteca
antes de pasear al perro
después de poner la mesa,
lo hacen.
A solas
con amigas
sin amigas
en pareja
con su prima
con la vecina
con el del after,
lo hacen.
Ellas se masturban
y vosotros, ignorantes,
volvéis el rostro
porque no está bien,
no es adecuado,
porque tanta libertad
os va a hacer daño,
porque tanto buen rollo
no puede ser bueno,
porque después de todo
lo que habéis conseguido,
después de todo lo que habéis abarcado,
después de tanto reino consagrado,
hasta el más pequeño gesto
puede ser
peligroso.
1 comentario:
Sí que se sorprende los ignorantes.
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