Ubú, cabeza pensante del Festival junto a sus secuaces: Antonio, Sonia y yo misma
Ha pasado una semana ya del Festival; necesitaba al menos ese tiempo para hacer balance personal de todo lo vivido. Ha sido, como en los dos años anteriores, una experiencia intensa, frenética en algunos momentos y desde luego, placentera en otros.
Todo empezó el lunes 11 con el montaje de la carpa en la Alameda, también la Tela de Araña. Luego el cóctel en el Hotel EME (¡qué glamur!),… Dicen que lo que bien empieza bien acaba y yo tuve esa sensación cuando me fui a dormir la noche del lunes.
Tela de araña (colectivo La Madeja)
A partir del martes, comenzó la locura… Mañana de Poetas en la calle, Homenaje a Machado, Homenaje a Hernández, poesía en la carpa, poesía baretera… Más de 160 participantes, se dice pronto…
Público de carpa
Creo que todos los que hemos participado organizando o recitando, tenemos que sentirnos orgullosos de haber creado expectación ante el acto poético, de haber llenado – literalmente – la ciudad de poesía, de haber acercado las letras a los ciudadanos por una semana de la mejor forma que hemos sabido hacerlo. Se han creado nuevos lazos y se han mejorado los que ya existían.
Ha sido un gustazo compartir todo esto con tanta gente y espero que cada vez seamos más y mejores.
POetas de calle (Carmen Valladolid) Poesía Baretera en el Perro Andaluz "Soy feliz", Gracia Iglesias
Dicen que la poesía en tiempos de crisis se hace especialmente necesaria… ¿será cierto? Igual resulta que vamos por buen camino. Lo veremos.
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